La verdad es que la condición humana no deja de sorprenderme..
Hoy he hablado con un señor jubilado que está triste porqué no sabrá muy bien qué hacer con su vida...es curioso que en cambio yo, sólo dejo de pensar en lo libre que me encantaría ser, quizás al final piense cómo él...quién sabe..
Y me dice que no sabrá qué hacer con el tiempo...y mi lista es interminable, pero todas las opciones que le doy le parecen absurdas, es como si su vida sólo tuviera sentido siguiendo con lo que había hecho durante 30 años atrás...
Bueno,no sé si es bueno o malo,pero sin saber muy bien porqué sentí una pizca de tristeza.
Y pensé en cómo se puede aprovechar el tiempo,
y me apeteció decirle que podía hacer lo que quisiera,
que los limites los poníamos nosotros y a veces los acercamos tanto,
que no nos dejan ni movernos, siquiera pensar.
Y pensé en como funciona el mundo, en la cantidad exagerada de tristeza acumulada últimamente en China,Birmania, en Tibet, en Israel,en lugares
y pensé otra vez que el mundo está mal repartido,
aunque quizás gracias a eso sigue rodando.
domingo, 18 de mayo de 2008
tiempo libre
Publicado por Mire en 13:01
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